El consumo de cigarro es de los vicios más dañinos para el ser humano; por ejemplo, el humo del tabaco contiene más de 4.000 sustancias químicas que dañan el cuerpo; sustancias como la nicotina, el formol y el monóxido de carbono, entre otros.
El consumo de cigarro, dependiendo del cuerpo de cada ser humano; ya sea a corto o largo plazo, provocará desórdenes en el organismo; los cuales, a la larga, generarían la aparición de enfermedades de mayor gravedad, como cáncer.
El consumo de cigarro provoca cambios en la piel de la persona, haciendo que ésta envejezca más rápido de lo normal. En el caso de la piel de las manos; suelen aparecer manchas. En el caso de la boca, los dientes centrales sufren de manchas y caries; además de que con el tiempo la dentadura puede llegar sufrir graves daños. El consumo excesivo del tabaco hace que uno sufra de impotencia sexual y en el caso de las mujeres, cuando pasan por el periodo del embarazo, puede provocar que el parto se manifieste de manera prematura, o incluso que se genere un aborto. Y uno de los problemas más comunes por los que sufre y pasa una persona que es adicta al cigarro es el enfisema pulmonar, ya que, al fumar, nuestro organismo recibe poca cantidad de oxígeno.