La Tapquinea es una afección de las vías respiratorias cuyas causas son muy variadas, sin embargo, unas de las más comunes son el asma, el enfisema pulmonar, la meningitis, infecciones pulmonares o patologías cardiacas. Con este nombre se conoce el aumento de la frecuencia respiratoria, es decir, la cantidad de inhalaciones y exhalaciones que alguien realiza en un lapso de tiempo determinado.
Se habla de que una persona padece esta enfermedad cuando el número de respiraciones por minuto supera el rango que se considera “normal” tomando en consideración su edad y estado de reposo o de actividad. Lo opuesto a esto recibe el nombre de bradipnea.
Valores normales de respiraciones por minuto
Este rango varía dependiendo del género, edad y estado de reposo o actividad de la persona. Sin embargo, para personas adultas se considera “normal” de 12 a 20 respiraciones por minuto. Este valor puede llegar a 45 cuando se realizan actividades de tipo físico de intensidad moderada y superar los 60 en el caso de deportistas y atletas.
Si una persona adulta en estado de reposo y realizando actividad física moderada supera las 20 respiraciones por minuto se procede a diagnosticar la tapquinea. Además del acelerado ritmo, la superficialidad es una característica inequívoca de esta condición.
Tapquinea en niños recién nacidos
Conocida como tapquinea transitoria del recién nacido es la afección que consiste en la persistencia del edema pulmonar de feto posterior a su nacimiento. Se habla de esta condición cuando las respiraciones del bebé superan las 160 por minuto y lo normal es que sean aproximadamente 60.
Cabe mencionar que la tapquinea en recién nacidos suele ser más habitual en niños que en niñas y al menos 1% la padecen. Sucede cuando el recién nacido no elimina, después de nacer, el líquido que ha permanecido en sus pulmones durante su proceso de gestación y suele desaparecer máximo tres días después del alumbramiento. No se le considera una condición peligrosa o de riesgo, debido a su carácter de transitoriedad, sin embargo, requiere de observación médica.
El aumento de ritmo respiratorio puede generar fatiga en los músculos de la persona afectada y causarle que deje de respirar. La Taquipnea varía dependiendo de la edad (los niños respiran más rápido que las personas adultas). Existen personas con ciertas afecciones como la obstrucción pulmonar crónica u otras lesiones pulmonares severas cuyos valores respiratorios “normales” igualan los de esta condición.